Mostrando entradas con la etiqueta ¿quién soy?. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta ¿quién soy?. Mostrar todas las entradas

29 de noviembre de 2018

CUARTO ANIVERSARIO

29 de noviembre de 2018. El rincón de la pecosa cumple 4 años y yo 28. Aunque cumplir años es un fastidio, ya no llevo brackets y sonrío a todas horas.

Mi vida laboral ha cambiado. Sigo trabajando en una academia de estética privada por las mañanas, pero por las tardes me dedico a realizar servicios en un pequeño y acogedor gabinete de uñas. Ofrezco servicios de manicura, pedicura y uñas acrílicas esculpidas. Trabajo muchas horas pero dicen que sarna con gusto no pica, ¿no? La falta de tiempo es el motivo por el cual no he podido escribir en el blog este último año. Me hubiera gustado, porque a pesar de ello sigo informándome de las nuevas tendencias, técnicas y productos que salen al mercado.

Mis alumnas siguen siendo especiales para mí, digamos que forman parte de mi vida. En ellas veo mi antiguo reflejo cuando era una esponja y vivía el aprendizaje como una aventura.

El mundo de las uñas es algo que me apasiona, siempre lo ha hecho. No hay nada mejor que tu hobby se convierta en tu trabajo. Me despierto con muchas ganas de cumplir mis objetivos diarios y de terminar en la cama exhausta pero llena de felicidad. 

Como cada aniversario, doy las gracias a los que seguís leyendo y acudiendo a mis artículos. Para todo el que se dedique a este mundo de la estética le deseo la mayor de las suertes, y por supuesto, que disfrutéis de esta maravillosa profesión.

Si me permitís un consejo os diría que cuidarais a la gente, que las llenarais de  detalles y profesionalidad y que agradezcáis cada oportunidad que os brindan para demostrar vuestro gran y buen hacer en el trabajo.

Feliz cumpleaños a mi sagitario favorita.

Atentamente, Elena.

29 de noviembre de 2017

TERCER ANIVERSARIO

Hoy es 29 de noviembre de 2017 y yo ya tengo 27 años. El rincón de la pecosa cumple 3 años y estoy muy orgullosa de que así sea. Ya he observado mi primera pata de gallo pero dicen que los brackets rejuvenecen, algo es algo.

Por suerte para mí, mi vida profesional no ha cambiado. Sigo trabajando en un academia de estética privada, en la que llevo dos años y medio. Tengo alumnas de todas las edades y condiciones, siendo para unas una profesión futura y para otras un pasatiempo. Me empeño en hacerles ver que tienen que hacer lo que les guste, ser esteticista es un trabajo que requiere paciencia y constancia. Es difícil ser buena en algo en lo que no te esfuerzas.

Me gusta mirar las ofertas de trabajo, para aconsejar y guiar a mi alumnado, y sus requisitos. Exigen que seas menor de 30 años, que tengas toda la formación existente y 5 años de experiencia mínima en el sector. Pero, ¿eso es posible? Ah, se me olvidaba, y con sueldos míseramente pequeños. La sequía laboral ha hecho que algunos empresarios aprovechen para hacer contratos a profesionales como si fueran aprendices. Si es que te ofrecen un contrato.

Y digo yo, ¿si hay demanda que es lo que falla?, ¿somos los profesionales los culpables? No entiendo el nuevo enfoque empresarial low cost, precios excesivamente bajos y trabajos mal realizados. Estamos convirtiendo servicios de lujo en una necesidad a la que se puede aspirar en cualquier lugar y a cualquier precio.

A pesar de todo lo que rodea nuestro ámbito profesional, me levanto cada mañana con ganas de ir a trabajar y superar todos los objetivos de mis días. Mi vida gira en torno a formar y formarme. Imagino tener academias de estética por todo el mundo donde lo más importante sea el aprendizaje, que no el dinero. Aunque todos trabajamos por dinero, para qué engañarnos. Me veo en lo más alto, en mis sueños, pero con trabajo duro y buenos consejos todo puede conseguirse, ¿no?

Quiero dejar claro que no trabajo para ninguna marca ni empresa. No gano dinero escribiendo ni es mi intención, mi objetivo es enseñar y aprender. Si recomiendo algo es por mi propia experiencia personal y profesional.

Doy las gracias a todos los profesionales y fanáticos de la estética que habéis leído, leéis y seguiréis leyendo este blog. Quiero que os sintáis como en casa entre las líneas de El rincón de la pecosa. Y, como cada año, tengo que agradecer a mi amiga todo el apoyo que me da, feliz cumpleaños.

Elena

29 de noviembre de 2016

SEGUNDO ANIVERSARIO

29 de noviembre de 2016, El rincón de la pecosa cumple 2 años. Acaban de llegar mis 26 años y me cuesta asimilar que dejé atrás los 25, un gran año en mi vida profesional.

Tengo una amiga (bueno, tengo exactamente 8), que lleva media vida apoyándome y prácticamente “obligándome” a que contara mi percepción de la vida estética, a que mostrara todo lo que he aprendido y aprendo, todo lo que vivo profesionalmente. Pasaron unos años hasta que decidí dar el paso de empezar y, por supuesto, lo hice el día de su cumpleaños. Cada aniversario será un homenaje a ella. Feliz cumpleaños.

Sigo viviendo por y para enseñar/aprender, trabajando en una academia privada de estética desde hace ya más de un año. Como siempre, intento inculcarles a mis alumnas (aún no tengo ningún alumno) el gran entusiasmo que siento por esta profesión. Siento que son más que personas que quieren aprender, son extensiones de mí. Son como yo, como fui. Las veo equivocarse y enfadarse por ello, y me parece bonito. Me parece lo más bonito.

Compañerismo, tan importante y necesario como respirar. Somos una familia y practicamos la convivencia cada día. No podrán llegar a ser buenas si dejan que la competitividad no sana las inunde. En cualquier puesto de trabajo tendrán compañeros/as que respetar, ayudar y valorar.

En nuestra academia, los servicios de estética son más baratos de lo habitual ya que el alumnado está en pleno aprendizaje. Aún así, hay clientes que no lo entienden y corrigen, infravaloran e incomodan al alumno/a impidiendo que pueda realizar correctamente el trabajo. Por supuesto, esto no sólo les pasara mientras aprenden sino también cuando sean profesionales. En estos casos, deben aclararle al cliente con total educación y respeto quién es el profesional y que no tiene de qué preocuparse. Desde mi punto de vista, la frase: "el cliente siempre lleva la razón" debe completarse con un: "hasta que deja de llevarla". Todo tiene un límite.

Esta profesión podemos dividirla en dos grandes sectores: técnica y creatividad. El trabajo técnico requiere esfuerzo, disciplina y mucha paciencia. Sin embargo, la imaginación es algo personal y en cada persona es diferente. Por lo tanto, además de saber cómo realizar el oficio hay otra parte importante: la innata y vocacional. Me esfuerzo enormemente en explicarle a todo el mundo, no sólo a las alumnas, el gran valor que puede llegar a tener trabajar disfrutando. El trabajo no dejará de ser trabajo pero resulta más ameno si eres feliz.

Vuelvo a dar las gracias en este segundo año de vida a todos los lectores, seguidores, profesionales y fans de la estética. También a mi clase, mis niñas, ellas son mi reflejo y mi esperanza de futuro para este gran mundo de la belleza.

“Soñar es la actividad estética más antigua”. Jorge Luis Borges

29 de noviembre de 2015

PRIMER ANIVERSARIO

Hoy, 29 de noviembre de 2015, hace un año que nació El rincón de la pecosa. A mis recién cumplidos 25 años, tengo el privilegio de seguir dedicándome plenamente a esta maravillosa profesión.

Actualmente me dedico a impartir clases, evidentemente de estética, en una academia privada. Cada día intento explicar a mis alumnas que la vida de una esteticista, por desgracia, está rodeada de contratos fantasmas, desprestigio profesional, intrusismo y poco compañerismo. Muchas personas siguen infravalorando nuestro trabajo, al igual que a las peluqueras, y creen que realizarlo requiere el mínimo esfuerzo o formación.

Hace unos años nos prohibieron utilizar los cortadores de callos, y ahora piensan hacer lo mismo con la depilación láser. Los fisioterapeutas y podólogos nos acusan de intrusismo y probablemente lleven razón, ya que muchas “esteticistas” carecen de formación para saber lo que pueden o no pueden hacer. Esto afecta a las de verdad. ¿Os habéis preguntado por qué los médicos son invencibles?. La unión les hace fuertes, cosa que a nuestro colectivo le falta. Ellos se tapan los unos a los otros mientras nosotras competimos.

En mis clases también dedico tiempo al compañerismo y al afán de ser una buena esteticista. Pretendo que aprendan a disfrutar de lo que hacen, a buscar la perfección en su trabajo, a corregir el mínimo detalle, y a ser las mejores sin pisotear a nadie. No trabajamos con madera, ni con ladrillos, ni con nada material, lo hacemos con piel. Lo más importante de todo es que podemos subir la autoestima de una persona con un buen trabajo. Somos artistas y la piel es un lienzo en blanco.

Soy de las personas que piensa en que no es más afortunado quien más es, sino quien es lo que quiere ser. Me parece realmente sorprendente las mujeres actuales que aún se describen sólo como “hija de”, “pareja de” o “madre de”, todas somos o seremos eso. Yo soy una mujer independiente, autosuficiente, atrapada en sus sueños, leal, optimista, emprendedora, carismática, demasiado sensible, impresionable y algo inmadura, pero sobre todo quise ser esteticista, lo soy y vivo de ello. Además de todo esto, por supuesto soy hija de unos inmejorables padres que me han inculcado sus mejores principios, pareja de un gran hombre que me llena de amor, hermana de dos apoyos incondicionales, tía de cuatro trocitos de vida y amiga de ocho superheroínas.

Quisiera agradecer a todas aquellas personas que me han seguido día a día este año, que me leen al menos cuando pueden, o que esporádicamente me han consultado. Todo esto lo hago por ellas, para informarlas, para motivarlas, y para que yo misma aprenda por el camino. Además, no puedo despedirme sin recordar a una de las amigas que me impulsó, ella sabe quién es y lo especial que es este día, para mí y para ella. Seguiré apoyando el mundo de la estética, mi mundo.

Muchas gracias. Firmado en el rincón de Elena.

29 de noviembre de 2014

LA ESTÉTICA COMO FORMA DE VIDA

Hoy, 29 de noviembre de 2014, es el día en el que doy a luz mi blog. Nací en este mismo mes de un hermoso otoño andaluz hace ya unos 24 años. Ante todo decir que soy una intrépida pecosa, luchadora con pintalabios y amante a voces de la estética. Siempre me interesó pero realmente empecé a los 17 años cuando tuve claro cual era mi vocación y mi vida.

La mayoría de las personas creen que estudiar un ciclo formativo medio de Estética Personal Decorativa es una fácil salida, quizás sin esfuerzos, y así lo creían esas 26 de 30 personas de mi promoción que no lo consiguieron.

En el ciclo formativo superior de Estética Integral me topé con la ilusión, las ganas y lógicamente con la competencia, que no son más que actitudes de enriquecimiento.

Tras cuatro años de formación me vi completamente envuelta en este mundo de la belleza, los detalles, la delicadeza.., de la imperfección en la perfección. Masajes, tratamientos, fotodepilación, depilación, uñas esculpidas, manicuras y pedicuras, maquillaje, micropigmentación, caracterización, pestañas postizas, etc. Me preguntaba en qué podía especializarme, todo me encantaba, pero algo surgía abrazando todo el contenido: la formación.

He trabajado durante dos años en una academia de formación impartiendo todas mis capacidades. Destaqué sin ninguna duda en las uñas esculpidas, se convertirían en mi mayor dedicación. Y así llegué el pasado año a mis primeras olimpiadas, Fantasy Nail Art por Nailympics. Los campeonatos son un motivo más para crecer, son horas de sacrificio y automotivación. Te ves como una total principiante delante de grandes profesionales que te doblan en edad y en conocimientos. A veces enseñas y otras aprendes, tienes que amar intensamente lo que haces para poder soportarlo.

A día de hoy, mi formación sigue creciendo mediante cursos, exposiciones, prácticas y mucho trabajo, pero a pesar de todo esto mi vida profesional es un mar de dudas, ¿quién decide la definición de belleza?. Puede depender de quién la mire, de la época, la moda o la cultura, es tan relativa como la vida misma.

Por todo esto he decidido regalarle a la estética algo más aparte de cada día de mi vida, un recodo sin esquinas, lleno de colores, armonía y pasión, el rincón de la pecosa.